La creación del nuevo Club Esgrima Atlántico nace del deseo de Yann Breteau, maestro de esgrima con más de 10 años de experiencia, de formar un grupo de floretistas en una escuela de gran nivel técnico y deportivo, donde primen los valores de esta disciplina: tradición, respeto y compañerismo.

 

El sistema de trabajo será el estudio individualizado de las necesidades de cada alumno, con el objetivo de alcanzar la perfección en la técnica, a base de combinar el trabajo intuitivo y la repetición.

La constancia y responsabilidad, contribuirán a desarrollar en nuestros alumnos habilidades tales como la autoconfianza, el autocontrol, la capacidad de reacción y la resistencia, potenciando su velocidad, y mejorando sus destrezas en equilibrio, coordinación, y reflejos.

 

Adquirir estas fortalezas ayudará a nuestros alumnos tanto en las pistas como en su vida fuera de ellas, ya que ofrece múltiples beneficios para el cuerpo y la mente. Les enseñará a tomar decisiones, manejar la frustración, esforzarse para la consecución de sus objetivos, entre otras.

 

La filosofía de los diferentes tipos esgrima de (base, ocio y competición) será distinta entre ellas, siendo la calidad del trabajo técnico nuestra principal base diferenciadora, común a todas ellas.